domingo, 29 de abril de 2012


s  FERROL :  ¿CIUDAD EN LIQUIDACIÓN?

     No, no se trata tan solo de un título, si no y por desgracia, de la triste realidad que vive nuestra ciudad. Una ciudad que hace tan solo treinta años – es decir, nada – era el fiel reflejo del trabajo, del progreso y de confianza en el futuro.

          Y es que hace tan solo ese tiempo, ¿Qué son treinta años? Ferrol era una ciudad llena de vida, colorido y alegría. Era una urbe despierta y viva, tremendamente viva. Nuestro “Ferroliño”, con más de 90.000 habitantes, era la tercera ciudad de Galicia, y lo era, no solo ya en población, si no también como ciudad industrial. Ferrol era, insisto, hace tan solo esos pocos años, una ciudad receptora de emigración, y lo era fundamentalmente, gracias a su industria naval.

          Pero Ferrol y junto al naval, también gozaba de una serie de industrias manufactureras como la Pysbe, la Fabrica de Lápices, la Peninsular Maderera, Manufacturas Piñón, Vaycora …etc, que hacían junto al personal de la Armada y el Ejercito, aquí destacados, que la ciudad fuese una “pequeña gran urbe”. Si, eso era Ferrol, una ciudad que trabajaba y por lo tanto, que despertaba y se ponía en marcha, mucho antes del amanecer de cada día.

          ¿Y por qué estamos entonces así ahora? Pues sin duda debido a un cúmulo de circunstancias, que todas unidas, hicieron que la sociedad ferrolana derivase en una sociedad acomodada y un tanto aletargada por la conciencia que fue adquiriendo de ciudad subsidiaria. Una condición ésta, que los propios y diferentes gobiernos del Estado se encargaron de alimentar y potenciar a lo largo de los años. Puede ser también ¿por qué no? que nuestra propia idiosincrasia sea proclive a esa condición de comodidad y desenfado, y es que, si así no fuese, no se entendería muy bien como es que al ferrolano no parezca afectarle excesivamente, ni los engaños ni los despropósitos, incluso desprecios, que sufre por parte de los que marcan y dirigen los destinos de la ciudad desde las diferentes administraciones.

          ¿Y hay culpables de ésta situación? Por supuesto, claro que hay culpables. Pero aquí en Ferrol, los culpables hay que decir que los somos todos. Cada uno lógicamente en su medida, pero todos. Políticos, sindicalistas, empresarios, comerciantes y ciudadanos en general. TOOOOODOS “.

          Los políticos, porque nos llevan engañando miserablemente un montón de años, y buena prueba de ello es lo que ocurre a día de hoy. Nos engañan con el tren al Puerto Exterior, con el Saneamiento de la Ría, con la sexta fragata, con el gran Centro de Reparaciones, con el Dique Flotante…etc.

           Los grandes sindicatos, por su excesiva pasividad (probablemente fruto de la acomodación) en nuestro sector estratégico (el naval) a lo largo de los últimos años. El problema que ahora está viviendo Navantia, no surgió por generación espontánea. Ya se veía venir, ya lo vaticinó Rumbo 21 hace dos años ¿y qué se hizo hasta ahora?. Y como ejemplo de esa pasividad y acomodamiento sindical, valga el mensaje que desde Madrid vino a transmitirnos recientemente a la sociedad de Ferrolterra, el secretario de la Federación de Industria de CC.OO, Felipe López, cuando manifiesta que los Acuerdos firmados en el año 2004 (por los que Astano está así) y que tendrían que dar lugar a una reindustrialización de la comarca, no están generando ni los puestos de trabajo que se esperaban, ni el sosiego y la tranquilidad que se demandaba para el futuro de esta zona. No D. Felipe, no se puede venir a Ferrol para decir solo eso a estas alturas de la película, después de ocho años.

          Los empresarios que nunca dieron la cara. Si, me refiero a esos que nunca se atrevieron a defender absolutamente nada para no importunar al político de turno para que éste no le diese al traste con esa subvención solicitada. Esos que, ante el dinero público, dieron y dan la callada por respuesta, esos que tanto defendieron y defienden todavía al Plan Ferrol por el empleo. Realmente no deja de ser curioso que quienes más defendieron y todavía defienden el Plan Ferrol, sean precisamente todos los que de alguna manera más decepcionaron, en estos últimos años, a la sociedad de Ferrolterra. Los políticos, los sindicatos y los empresarios.

          No obstante, con estos tres grupos el circulo no queda cerrado, pues en este escenario, todavía faltan dos colectivos, que son, los comerciantes y la ciudadanía en general.

          Los primeros, por ese sistemático y tozudo comportamiento de no querer entender y reconocer que viven, fundamentalmente, del sector naval, y por lo tanto, de que eso es algo que tendrían que defender tanto o más que los propios trabajadores del mismo. Y siendo esto así y lo es ¿Por qué entonces el comercio ferrolano estuvo siempre tan alejado de los trabajadores del sector naval? O lo que es lo mismo ¿Por qué los comerciantes estuvieron durante tantos años en contra de sus propios intereses? Ferrol es sector naval y los comerciantes, también son Ferrol. Por lo tanto, los comerciantes también son sector naval.

          Y ya por último, la propia sociedad de Ferrolterra. Los ferrolterranos y ante la falta de iniciativa de los políticos, de los sindicatos y de los empresarios, tienen que entender de una vez por todas que tiene que ser ella, la sociedad, la que agarre el toro por los cuernos y le haga frente a las diferentes administraciones y gobernantes. Con 20.000 parados no se puede esperar más.

          En Ferrol y comarca se hace necesario rectificar por parte de todos. Todos tenemos que llegar a entender y ver, que el futuro de unos es el futuro de todos. Y, o estamos todos juntos peleando por un mismo objetivo o estamos todos muertos en un futuro inmediato. Reflexionemos seriamente sobre esto y peleemos todos unidos por lo que a todos nos interesa. Y si los agentes sociales no lo quieren entender y anteponen al interés general, los intereses particulares de cada colectivo, la sociedad ferrolana tendrá que dar pasos al frente sin ellos, aunque eso, esperemos que no suceda. Somos una comarca potencialmente fuerte, pero nos falta UNIDAD. Trabajemos todos sin excepción para conseguirla.





                                                      

sábado, 14 de abril de 2012

              SEGUIMOS  EN  EL  PUNTO  DE  PARTIDA



          Bien, ya ocurrió lo que muchos nos temíamos que podía suceder. El Ministerio de Industria del gobierno del Estado dijo que Navantia no necesitaba un dique flotante. ¿Y es esto así? Bueno, si pensamos en Navantia de una forma global y queremos ser objetivos, tenemos, más que nos duela, que intentar comprender la respuesta dada por el Ministerio, pues la compañía y en la Bahía de Cádiz, ya cuenta con un dique seco de 500 x 100 en Puerto Real y otro, seco también, de 286 x 66 en las instalaciones de Reparaciones Cádiz.

          Pero es que la cuestión no son las necesidades de Navantia, sino las de la Ría de Ferrol. Quienes necesitamos el dique flotante – como ya dije en otra ocasión en un artículo publicado por este mismo periódico – somos nosotros, los de Ferrolterra. Y por eso, aquí no podemos dar por buenas y por lo tanto no podemos aceptar, las explicaciones dadas por Industria. Ahora es momento de exigir y con toda la fuerza de la que seamos capaces, que se cumpla todo aquello que nos prometieron hace tan solo unos pocos meses. En campaña electoral.

          Ahora ya no es momento de demostrar, como indicó el presidente del comité de empresa de Ferrol, Fernando Sinde, la viabilidad del dique flotante. El problema no radica en la viabilidad de la infraestructura que se solicita y por lo tanto, la cuestión no está en demostrar lo acertada y conveniente que seria su construcción.

          Eso ya lo saben todos y cada uno de los técnicos de Navantia, de la Sepi y del Gobierno de España. La cuestión es que en los grandes partidos haya auténtica voluntad política para encontrar soluciones. No se puede comprender que a estas alturas se pongan encima de la mesa proposiciones de pactos de no agresión utilizando el naval en nuestra comarca como hizo la secretaria general de los socialistas ferrolanos, Beatriz Sestayo. ¿A qué se estuvo jugando hasta ahora?

          Ese es el gran problema que tenemos en Ferrolterra. Lo tenemos con el naval, con el tren a Caneliñas, con el saneamiento de la ría…etc. En lugar de hacer piña por aquello que nos interesa a todos, nos destrozamos defendiendo cada uno lo suyo. Y así nos va.

          Ahora es, más que nunca, momento para la unidad. Una unidad que puede y debe de llegar a través de la generosidad en la negociación por parte de todos los estamentos de la sociedad. Es necesario abandonar, al menos en las circunstancias que vivimos, las posturas intransigentes y los idealismos férreos que no conducen a ninguna parte. La batalla hay que darla en el campo político, y para eso, la unidad de todos los ferrolterranos es fundamental. Si no somos capaces de superar este reto, realmente tampoco nos podremos quejar de estar continuamente en el punto de partida de todos los problemas.

                                                                         

                                                                           

           


miércoles, 4 de abril de 2012

¡¡ QUE VERGÜENZA DE GOBERNANTES !!

          La verdad es que no hay por donde cogerlos, son tan sumamente hipócritas, que realmente uno ya no sabe por donde ir ni que pensar. ¿Recuerdan Vds cuando hace tan solo unos pocos meses el PP increpaba, y de que manera, al en aquel entonces ministro de Fomento, José Blanco, para que fijase fechas para el AVE a Galicia? ¿Recuerdan como le reprochaban que no respetase la llegada del AVE para el año 2015 que era lo acordado en el Pacto del Obradoiro? Bien, pues ahora, el PP y aún siendo incapaz de poner fecha, ya habla del año 2018.
         Ahora el PP gallego - ya hay que tener cara - justifica la postura, tanto de la ministra Ana Pastor, como la de D. Mariano. Que bonito queda decir, como dijo estos días en A Coruña la ministra de Fomento, que los presupuestos preservarán el AVE a Galicia. Pero coño, si eso es verdad y los presupuestos van a reservar las inversiones necesarias para el avance de las obras ¿Por qué no se marcan los plazos para la realización de las mismas? Pues sencillamente, porque una vez más nos van a tomar el pelo. Y claro los que ahora callan y además de callar justifican lo injustificable, son los populares gallegos. ¡Que desvergüenza!
         La conexión de las siete grandes ciudades de Galicia con Madrid en menos de tres horas fue un compromiso del Sr. Aznar en el consejo de ministros celebrado en A Coruña en Enero del año 2003 para culminar en el año 2009. Más tarde el Sr. Zapatero modificó esa fecha y la trasladó al año 2012, luego y en el Pacto del Obradoiro, se marcó el 2015 como el año de la finalización de las obras, y ahora, se habla del 2018. ¿Pero qué clase de gobernantes y políticos tenemos? ¿Realmente se merece esto el pueblo? Si España va de bandazo en bandazo es precisamente por la falta de rigor y seriedad en quienes la gobiernan.
         Otro buen ejemplo de falta de sentido común y responsabilidad es la amnistia fiscal aprobada para aflorar el dinero negro. Y es que, aún dejando a un lado el si se invita o no a delinquir fiscalmente con este tipo de iniciativas, porque luego no pasa nada o casi nada, lo que no podemos olvidar es que esta amnistia ya la quiso poner en práctica el gobierno de Zapatero, y el Sr. Rajoy dijo textualmente: " Eso es una ocurrencia de los socialistas que yo nunca aceptaré ". Y mira tú por donde.
          Aumque lo curioso del caso, ya no es tanto que Rajoy ahora aplique algo de lo que antes renegaba, al fin y al cabo, a estas cosas ya nos tiene un poco acostumbrados, lo singular de esta cuestión, es que ahora resulta que quienes la quisieron aplicar antes, los socialistas, ahora se muestran en contra y tampoco la apoyan. ¿Pero quién coño entiende a esta gente? Bueno, pues esos son los políticos que tenemos. Los que dicen que España es lo importante. ¡¡Serán mentirosos!!
         En fin, yo y una vez más, digo que la solución también está en nuestras manos. Pero claro, para eso se necesita resolución y eso no fue precisamente algo que hayamos demostrado tener hasta el momento. Por lo tanto y mientras no cambiemos de paso, poco más podremos hacer que quejarnos.
         ¡¡ AH !! por cierto, ¿Llegará el Puerto Exterior de A Coruña a tener tren antes que el Puerto Exterior de Ferrol? Yo, francamente, no apostaria nada.